Monday, August 25, 2008

Estar vivo

Fin de semana largo en UK. Bank Holiday como le dicen aca. Todo gira en torno al vil metal, al dinero, a la guita, como decimos en Argentina. Como decidimos no ir a ningun lado, y como estoy a solo dos semanas de mi ultimo Half Ironman, entonces decidi meterle rosca.

Viernes: 1 km de natacion. Intervalos de 100 m a fondo con 30 segundos de descanso. Luego, y seguidito y sin parar, 5 millas en el treadmill a paso de carrera.

Sabado: 2 horas de bici, en donde empece con un plan nuevo (un poco tarde para hacer cosas nuevas..no?). Se trata de variar la cadencia (RPM) cada 5 minutos. De manera que hago 5 min a 60 rpm, empujando un cambio pesado y luego subo a 100 rpm, empujando uno liviano. El primero, desarrolla fuerza, el segundo mejora la eficiencia del pedaleo.

Luego de las 2 horas de bici, y sin descanso, salte de la montura y le meti 1 hora de correr a paso de carrera de 10 km (162 latidos por minuto). La primer milla fue dolorosisima: ambos cuadriceps reventados por el esfuerzo de la bici y ambos biceps femorales al borde del calambre. Sin embargo segui.

Es alli cuando la mente propone alternativas para evitar el dolor. "Corre solo 30 minutos...ya entrenaste lo suficiente". Y es alli cuando la voluntad debe imponerse. Es entonces cuando recorde la frase que lei no se donde: "El dolor nos recuerda que estamos vivos".

Asi somos los atletas: talentosos o mediocres (este soy yo), dotados o del monton, rapidos o lentos...todos somos un poco masoquistas. El dolor nos recuerda que no estamos moviendo, que la vida continua. Como decia un amigo, luego de los cuarenta, si te levantas a la manana y no te duele nada, estate seguro que te has muerto. El dolor es un velocimetro: nos dice que tan rapido estamos viviendo la vida. Si duele mucho, pues aflojemos un poco ya que vamos muy rapido.

Domingo: 1.6 km de natacion y 1 hora de correr. Esto fue lo mas dificil de todo. Correr una hora luego de un sabado a fondo. Nuevamente, los dolores aparecieron, y el masoquista siguio. Sin embargo, cuando el reloj llego a 60, y la cinta de correr se detuvo, y las endorfinas estaban por las nubes, la vida me sonreia. Un fin de semana mas con la satisfaccion del deber cumplido.

2 comments:

Ferran Vila said...

Que bueno. Miles de veces he tenido es mismo pensamiento, "haz 30 minutos y dejalo" o "me doy la vuelta en el siguiente cruze". Siempre cuesta, pero que bien se siente uno cuando vence estos pensamientos.

German Alonso said...

La lógica se aparta completamente de nuestros planteamientos. Cuando le cuentas a la gente lo que haces te dicen que estás loco y no les falta razón. Yo siempre les digo lo mismo: pruébalo y me cuentas.

Hay algo de mágico en el dolor que engancha estoy de acuerdo.

Un abrazo, Germán.