Sunday, June 24, 2007

Domingo dificil

El cuerpo humano es una maquina perfecta. Cada vez que salgo a entrenar me maravillo de la facilidad que tiene este cuerpo que habitamos de adaptarse a nuevas condiciones de estres. Lo mas increible de todo es lo que me paso durante el entrenamiento del dia de hoy.

Me tocaban hacer 2000 yardas de natacion (unas 80 piletas) y 1 hora y 20 de correr. La natacion es de hecho mi debilidad mas grande. El aire no es gratis y respirar es una de las cosas que mas me cuesta hacer. Cuando empeze a nadar, mi mente comenzo a hablarme. Me decia: "Todo lo que te falta, solo llevas 10 largos....no creo que llegues". Y a medida que el entrenamiento progresaba, la voz interior era cada vez mas fuerte y clara "estas cansado...mejor para".

Y cuando comenze a correr, a las 10 y media de la manana, bajo un sol inclemente de casi 28 grados centigrados, asandome como un pollo al spiedo, daba un paso tras otro, escuchando la misma voz cansina, repetitiva, abrumadora..."no podes mas...mejor descansa", me gritaba incesantemente.

Fue alli cuando esboze la teoria del cansancio: la mente recibe senales quimicas del cuerpo, llamese acido lactico o cualquier otro producto de la degradacion muscular. La mente interpreta esas variaciones sanguineas y las traduce en pensamientos como los que yo tuve ("mejor para" o "estas cansado", "una pileta de agua helada", "una cervecita bien fria"). No es mas que una adaptacion quimica a una situacion de estres. El cansancio no existe sino en mi mente, el calor no es tal sino lo que yo siento. Mi cuerpo esta bien.

Llamese distraccion, coraje, adaptacion al cansancio o simplemente un escape, pero funciono. Solo el hecho de racionalizar esta teoria me dejo terminar con la hora y veinte de correr.

Distancia total:
Natacion: 1800 metros de natacion, 14.5 kilometros de rostizaje...perdon correr.

2 comments:

SlowPepe said...

Felicidades, Jorge. Toda una victoria mental. Decía el ultramaratoniano Dean Karnazes que el dolor existe, y la clave es "how much you can take", y ahí los juegos mentales son importantes. Le ganaste a la vocecita, en el agua y golpeándo el asfalto bajo el sol. Más vale que así sea, porque te espera un sueño de 226 kilómetros, y eso son palabras mayores.

Un fuerte abrazo.

Pepe.

German Alonso said...

Me apunto este blog (con tu permiso) porque, aunque lejanos, tengo los mismos objetivos que tú. Para mí el IRONMAN es una barrera infranqueable, veo a los "finisher" como verdaderas máquinas de voluntad.

Sólo el hecho de que te hayas planteado apuntarte merece mi más absoluto respeto.

Ánimo campeón, tienes una meta, ser un FINISHER.

Un abrazo, Germán.